Transcripto por Hugo P. Castello, MACN: en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara". 2013.
El director del Museo Público fue sorprendido por la designación del joven Luiís Fontana en el Museo y posteriormente por su enganche en el ejército nacional sin que éste se lo comunicara primero. Para la forma de ser del Dr. Burmeister éstos eran hechos seguramente inadmisibles. Fontana sabia que si solicitaba el permiso, Burmeister se lo hubiera denegado. A continuación sigue el texto de una carta de Burmeister escrita en 1870 al Ministro de Gobierno explicando los motivos por los cuales solicita el alejamiento de Fontana del cargo que ocupaba.
El director del Museo Público fue sorprendido por la designación del joven Luiís Fontana en el Museo y posteriormente por su enganche en el ejército nacional sin que éste se lo comunicara primero. Para la forma de ser del Dr. Burmeister éstos eran hechos seguramente inadmisibles. Fontana sabia que si solicitaba el permiso, Burmeister se lo hubiera denegado. A continuación sigue el texto de una carta de Burmeister escrita en 1870 al Ministro de Gobierno explicando los motivos por los cuales solicita el alejamiento de Fontana del cargo que ocupaba.
Copia fiel de la nota AHMACN No. 267
"El Preparador del Museo Público, D. Luís Fontana se ha alejado de su empleo desde el 27 del mes pasado (abril) sin hablar conmigo antes sobre su ausencia premeditada, avisándome por carta con fecha del 28 de abril, carta que me ha sido entregada por un jovencito al 30 de abril, a las 3 de la tarde, que el Sup. Gobierno ha dado a él licencia de ausentarse de Buenos Aires por algún tiempo mas, no definido. Por esta licencia falta actualmente en el Museo Público una persona que cuide a la gente en los días públicos, como también algún asistente para las obras corrientes, lo que me obliga a solicitar de V.S. el permiso de aceptar una otra persona facultativa para sustituirlo, pagándole el sueldo de este empleado hasta su regreso. Al mismo tiempo me permito hablar a V. S. sobre la conducta poco satisfactoria con el cual el joven Fontana ha cumplido su empleo hasta ahora.
No es la primera vez ………………
Se trata este joven como una persona completamente independiente, aun el ha recibido su colocación (empleo) por mi informe benévolo al Sup. Gob. dado de mi no tanto en consecuencia de sus facultades muy limitadas, que por la confianza en su buena voluntad hace mi conducción útil a su patria y estudios con diligencia para completar los grandes vacíos de sus conocimientos.
Pero de ningún modo el ha cumplido mi presunción de su buena voluntad, faltando desde el principio de su colocación a la hora fijada por el reglamento de su entrada en el establecimiento y retirándose también antes del termino fijo de sus trabajos diariamente.
En el principio he hablado con él repetidas veces sobre esta negligencia continua y principalmente sobre su mala conducta, deja al museo sin vigilancia en los días públicos hasta las once y hasta la doce, pero no he conseguido nada; el me contestó, que las circunstancias de su casa no se lo permitían venir mas temprano y me he visto obligado, no hablar mas sobre este asunto para no repetir serios conflictos.
Muchas veces no viene por días enteros y cuando vuelve no se excusa nunca sobre su ausencia, de todo el se trata no como dependiente, sino como voluntario independiente que cumple por favor con las obligaciones de su empleo.
Respecto de estas obligaciones el no es capaz de satisfacer las obras de un preparador bueno y hábil. No sabe armar ningún mamífero o pájaro más grande que un conejo o una palomita y aun estas pequeñas obras salen bastante mal. Durante todo el tiempo de su ocupación en el Museo Público desde el 23 de Noviembre de 1868, el no ha trabajado mas que una docena de objetos pequeños, obligándome a dejar “inarmadas” (sin armar) las mas grandes o pagar obreros particulares para la armazón de éstas, como ha sido el caso con el lobo marino recién armado por el preparador Moser.
El mismo no niega la falta de facultad suficiente para armar objetos grandes, el mismo me contestó que no puede armar un tigre o un águila, y se contenta con este defecto como una cosa insignificante,….
Para dar a él ocasión de hacerse útil al Museo Público, lo he instado a hacer colecciones de insectos, avisándole como se pican y tratan a estos animalitos delicados. Pero con excepción de un grande coleóptero recibido de un amigo del Paraguay, el joven Fontana no ha traído al Museo Público ningún insecto bien armado, la pequeña colección que el me ha ofrecido una vez, ha sido de tal modo tan mal tratada que no la pude aceptar como cosa útil al establecimiento.
Así ha sucedido que no pude (tener) ocupado al joven Fontana de otro modo, que como asistente de las obras ejecutadas por mi mismo, ……………………..
No sé, de cual modo puede ser útil este joven al Museo Público para lo futuro… el no muestra interés para aumentar las colecciones… aun él es tan ignorante que no conoce ningún animal del país científicamente. Al fin su “malo” ejemplo “corrumpe” a los otros empleados, que se creen autorizados a permitirse la misma negligencia, que muestra el preparador.
Es evidente, que no puedo ser contento con la conducta de un empleado de esta clase y por esta razón me he visto obligado dar razón francamente al Sup. Gob. De la situación mala, como la es, invitándole pensar y rogándole tomar las medidas necesarias para impedir sea insultado otra vez por un empleado subalterno en un modo tan ostensivo y premeditado ."(AHMACN No. 267) (6/5/1870).
Transcripto por Hugo P. Castello, MACN: en comisión enla Fundación de Historia
Natural "Félix de Azara". 2013.
Comentario: el borrador de esta carta al Ministro Malaver se extiende en tres largas carillas y reflejaría el extremo cuidado que toma Burmeister en justificar porque el joven Fontana no puede continuar trabajando en el Museo.
Quizás Burmeister sabía que Fontana contaba con apoyo político y presenta sus argumentos con lujo de detalles, algo inusual de su parte. La realidad demostró que tuvo que pasar mas de un año hasta que el Ministro Malaver se vió forzado en aceptar nuevamente la solicitud de Burmeister de despedir a Fontana de su puesto.
Nota: con posterioridad Fontana se dedicó a explorar el territorio del Chaco y fue su primer gobernador y a partir de 1884 se convirtió en el primer gobernador del Chubut.
Tte. Cnel. Luis Jorge Fontana 1884-1893: Primer Gobernador del Chubut, cargo en el que permaneció diez años y en los que efectuó una tarea notable como descubridor, fundador de colonias y promotor del progreso. Allí dirigió la expedición al oeste, con un grupo explorador denominado los "Rifleros del Chubut", que descubrió el valle 16 de Octubre, zona fértil precordillerana que se convertiría en un nuevo asentamiento de la colonia galesa de Trevelin.
Transcripto por Hugo P. Castello, MACN: en comisión en
Comentario: el borrador de esta carta al Ministro Malaver se extiende en tres largas carillas y reflejaría el extremo cuidado que toma Burmeister en justificar porque el joven Fontana no puede continuar trabajando en el Museo.
Quizás Burmeister sabía que Fontana contaba con apoyo político y presenta sus argumentos con lujo de detalles, algo inusual de su parte. La realidad demostró que tuvo que pasar mas de un año hasta que el Ministro Malaver se vió forzado en aceptar nuevamente la solicitud de Burmeister de despedir a Fontana de su puesto.
Nota: con posterioridad Fontana se dedicó a explorar el territorio del Chaco y fue su primer gobernador y a partir de 1884 se convirtió en el primer gobernador del Chubut.
Tte. Cnel. Luis Jorge Fontana 1884-1893: Primer Gobernador del Chubut, cargo en el que permaneció diez años y en los que efectuó una tarea notable como descubridor, fundador de colonias y promotor del progreso. Allí dirigió la expedición al oeste, con un grupo explorador denominado los "Rifleros del Chubut", que descubrió el valle 16 de Octubre, zona fértil precordillerana que se convertiría en un nuevo asentamiento de la colonia galesa de Trevelin.
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