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jueves, 15 de noviembre de 2012

Las prioridades que Burmeister se fijó para el Museo Público de Buenos Aires

2012.  Hugo P. Castello, MACN en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".

De la lectura de las notas elevadas por Burmeister a las autoridades provinciales o a los distintos Ministros del Superior Gobierno de la Provincia
de Buenos Aires (1862/92), existentes en el Archivo Histórico del MACN (AHMACN) surge, que en una primera etapa su prioridad fue clasificar las colecciones que ya existían en el Museo antes de su llegada a Buenos Aires. No bien llegó al Plata. Su segunda prioridad  fue proponer al Superior Gobierno, que el Estado adquiriera su colección privada de libros científicos y separatas, y cuando su propuesta fue aceptada, se dedicó a ingresar de un modo resumido los títulos  y años de las valiosas publicaciones que habían formado parte de su colección privada en lo que fue el primer catálogo de la Biblioteca (ver Catálogo de la Biblioteca). Dos años después de su arribo inició la publicación de la primer entrega del Tomo Iº de los Anales del Museo Público (1864), tarea que luego le habría de demandar demasiado tiempo, le causaría muchos inconvenientes y sufriría serias demoras, en especial con el diseño e impresión de las litografías, y que influyó en que postergara la publicación en el exterior de sus descubrimientos, y lo llevó a suspender la publicación de los Anales entre los años 1874 y 1883. (Tomo I: 1864-1869; Tomo II: 1870-1874, y Tomo III: 1883-1891).

Museo Público frente a la plazoleta de la esquina de Potosí y Perú , posteriormente demolida. La plazoleta enfrentaba al Mercado Central, demolido en 1907.



Burmeister en 1849: Litografía en base a un daguerrotipo, previo a su llegada al Plata. En su libro "Historia de la Creación, Leipzig, edición de 1856).


Burmeister publicó como geógrafo, geólogo, zoólogo, botánico, paleontólogo y meteorólogo.

Sus intereses principales, en el período previo a su llegada a estas tierras, fue el estudio de los insectos (Entomología
) y sus relatos de sus viajes, y en los últimos 30 años de su vida, el estudio de los fósiles pampásicos (Paleozoología). Ya instalado en el museo estudió principalmente los mamíferos fósiles del la Pampa dando a conocer al mundo científico muchas especies, a través de monografías muy bien ilustradas. Aprovechó también la existencia de la Revista Farmacéutica, publicada por la Sociedad de Farmacia de la Argentina, que había sido fundada en 1857 por Antonio Demarchi (ex Director del Museo Público) y continuada por el farmacéutico Antonio Torres 1858-1860), en la que publicó tres artículos sobre Gliptodontes, un delfín xifoideo e insectos (1864/1865) (1). A pesar de la pesada tarea de editar los Anales entre los años 1864 y 1891, Burmeister pudo publicar en español en los Anales, un total 24 trabajos de su autoría, siendo el mas extenso, el dedicado a la Monografía de los Glyptodontes, con 7 entregas (1870/74), pero siendo igual de importantes sus trabajos sobre delfines, ballenas y lobos marinos varados en la costa del Río de la Plata (3), o sobre los poco conocidos picaflores (1), o los insectos (1), etc.














Cráneo de un "armadillo fósil" Panochtus descripto por Burmeister



Las publicaciones científicas

También editó dos tomos del Boletín del Museo Público, publicados como anexos de los Anales y en ellos publicó 4 artículos sobre cetáceos y lobos marinos, y uno sobre la Macrauchenia (1871-72). El 11 de julio 1866, fundó junto con el rector de la Universidad, J. M. Gutiérrez, la Sociedad Paleontológica de Buenos Aires y publicó, como addenda del tomo Iº de los Anales, las Actas de la Sociedad Paleontológica
de Buenos Aires (julio 1866-marzo 1868), que fue la sucesora de la Asociación Amigos del Museo, que había tenido a su cargo al Museo Público entre los años 1852-1862, y cuya actividad había mermado sustancialmente. En ellas publicó un total de 11 notas breves sobre distintos temas de fauna actual y extinta. (Ver Sociedad Paleontológica de Buenos Aires).

Larvas de Lepidópteros estudiados por Burmeister y publicados en su Manual de Entomologia (Handbuch der Entomologie, 1832).

El 16 de marzo 1870, Burmeister fue invitado por el presidente Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888) y su ministro Nicolás Avellaneda (1837-1885) para organizar la futura Academia Nacional de Ciencias de Córdoba, recibiendo el título de Comisionado Especial y Comisario de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad Nacional de Córdoba. Esta función se esperaba que durara dos años, y aprovechó ese período para publicar tres trabajos sobre insectos, en el Boletín de la Academia.
Al suspender por variados motivos la edición de los Anales, entre los años 1874 y 1883, había retornado a su pasión, que era la de investigar y publicar sus descubrimientos, conociéndose de ese período un total de 36 artículos científicos de su autoría sobre insectos, cocodrilos y vertebrados fósiles, pero en especial pudo publicar tres de sus monumentales obras (Ver: los “Caballos Fósiles de las Pampas”, 1876 y la "Description Physique de la République Argentine d´apres des observations personelles et étrangères”(1876-1886); y el atlas “Vues pittoresques de la République Argentine1881”.



Litografia de una acuarela pintada por Burmeister de la Barranca del Arroyo del Salto, publicada en Vues Pitoresques... 1881.


Se podría afirmar que, de no haber suspendido la edición de los Anales durante una década y postergar la pesada carga de encargarse de los dibujos, del envío de las láminas por barco a Europa para la preparación de las litografías, etc., y la impresión de las mismas en las imprentas de Buenos Aires, o del envío por correo de los Anales para intercambio con otros centros de investigación del exterior, las obras escritas por el sabio, que a continuación se mencionan, seguramente las siguientes obras:
no hubieran visto la luz:
Los caballos fósiles de la Pampa Argentina
Esta obra fue publicada en dos ediciones separadas en alemán y con apoyo oficial en español (2) en el año 1875, en ambos casos la tirada fue baja y orientada para el mercado extranjero, hecho por el cual no se encuentran copias, actualmente, en casi ninguna biblioteca especializada argentina. Un año mas tarde Burmeister presentó “Los caballos fósiles de la Pampa Argentina” ante los miembros de la Sociedad Científica Argentina, de la cual era socio: y la publicó en los Anales de la Sociedad Científica Argentina, (Buenos Aires, 1876). Mas tarde en 1879 y 1889 actualizó la obra y la publicó nuevamente en dos ediciones separadas en alemán y español (Burmeister, 1875a, 1875b, 1879, 1889) (3).
Description Physique de la République Argentine a´ près des observations personelles et etrangeres” (Coni, Buenos Aires; Savy, París, 1876-1886); fue primero escrita en alemán y posteriormente en francés (el Tomo I fue editado y enviado con una dedicatoria impresa dedicada a Sarmiento). Comprendió un total de cuatro tomos editados desde 1876 al 1879 junto con el album "Vues pittoresques de la Republique Argentine"(1881), que traía masificas ilustraciones de paisajes del país .y en la que él no fue el único ilustrador. Editado por el Instituto Geográfico Argentino, mereció en la Exposición Geográfica de Venecia (1891) la medalla de oro por la calidad y cuidado en su presentación. Las obras de Los caballos fósiles de la Pampa Argentina y la Description Physique de la République Argentine
fueron expuestas por Burmeister en la Expo Universal de Paris en 1877

Recibo de la Comisión Organizadora de la Expo Universal de Paris donde Burmeister entrega ejemplares para exponer de los Anales del Museo, Los Caballos Fósiles, Acta de la Academia Nacional de Ciencias Exactas y la Description Physique de la Republique Argentine (18/12/1877).




Tareas burocráticas y las numerosas dificultades encontradas
Pero simultáneamente Burmeister se ocupó de encomendar la edificación de una nueva sala para la exhibición de esqueletos de ballenas (1871); solicitó y obtuvo fondos en reiteradas oportunidades para que un carpintero construyera estanterías y bibliotecas para la colección científica y ubicar los nuevos libros que adquiría en Europa u obtenía por canje con los Anales. En cuanto a los trámites burocráticos cabe consignar que tenía la obligación de elevar en forma periódica el pedido anual de presupuesto para el año siguiente, y al inicio de cada nuevo año redactar la Memoria Anual de actividades e incremento de las colecciones para el Departamento Estadístico de la Provincia de Buenos Aires, al igual que una rendición anual de los dineros recibidos en forma regular para el abono de salarios y los gastos de la “caja chica”. No solicitó por escrito, a diferencia de Ameghino que fue el Director del Museo (1902-1912), que se construyera u otorgara un nuevo edificio para el Museo, solamente se limitó a solicitar reparaciones y agregados de nuevas salas o depósitos. La única actividad que desarrolló en forma sostenida durante los 30 años en que estuvo a cargo del Museo, fue la de incrementar en forma periódica, la colección de publicaciones científicas de la Biblioteca
del Museo. Casi todos los años solicitó y obtuvo fondos especiales para la compra de libros y revistas científicas que le proveían libreros de Halle, Paris y Londres, la mayoría de ellas en idioma alemán y unas pocas en inglés o francés. Es interesante destacar que jamás compró publicaciones en inglés provenientes de los EE.UU.
La falta de buen papel (o su elevado costo) para escribir los borradores de sus notas a los miembros del Superior Gobierno o para llevar a cabo la contabilidad de sus gastos llevó a Burmeister a escribir en el reverso de los sobres del correo que recibía o en el reverso de los programas de actividades culturales, o de las notas que recibía del exterior y de sus superiores en el Gobierno.




Programa de concierto del Coliseo (Sept., 1881) que usó en el reverso como papel borrador de una nota.
El Museo Público de Buenos Aires o Gabinete personal del científico.
Si bien algunos autores consideran, que el Museo bajo la dirección de Burmeister se convirtió en su gabinete particular de ciencias, con una rica colección científica de fósiles, insectos y aves, y mucho mas pobre en reliquias históricas u obras de arte, al que muy pocos investigadores locales tuvieron acceso, es loable destacar que a la muerte de Burmeister en 1892, 30 años después de su arribo al Plata, el Museo contaba para entonces con una colección correctamente clasificada, una revista propia (Anales del Museo Público) y una excelente biblioteca científica, la mas rica del país en publicaciones de ciencias naturales de aquel entonces. La enseñanza y divulgación de las ciencias al gran público había quedado postergada, ya que se había resignado a que en el vetusto edificio no pudiera exhibir, por falta de espacio, el esqueleto de las ballenas que halló y describió en la costa del Río de la Plata
, o que éste estuviera mal iluminado, o que la escasa superficie le permitiera albergar y exponer las colecciones de fósiles, y a la carencia permanente de personal.
Jamás en esos 30 años dispuso en las instalaciones del primer piso del Museo de un toilet, y no existe registro escrito de que se halla quejado al respecto, para lo que tenia que usar, a pesar de su edad, las instalaciones sanitarias de la planta baja del vetusto edificio.
Los salarios excesivamente bajos que pagaba a los porteros del establecimiento lo obligaban a cambiar de personal permanentemente,  y aparentemente su legendario duro carácter, lo llevaron a cambiar, en reiteradas oportunidades, de empleados, al igual que del cazador, preparador e inspector, etc.
 Al pasar de los años, la burocracia provincial, que dio lugar a la nacional, se incrementó a partir del año 1884. El Gobierno Nacional lo obligaba, a partir de ese año, a realizar rendiciones mensuales de ingresos y egresos tanto de los salarios abonados como de los gastos para la compra de masilla, compra de sellos postales para el envió de cartas, el pago del changarín al puerto ,que iba a buscar los libros que llegaban de Europa, los honorarios del encuadernador, el envío de sumas de dinero a Europa (letras de cambio) para abonar a los libreros y a las compañías navieras que transportaban los cajones de libros para la biblioteca, etc. Burmeister se ocupó de recibir donaciones, de disponer la compra de colecciones científicas, de recibir donaciones de monedas antiguas y  medallas conmemorativas, de preparar trabajos científicos, de publicarlos en los Anales o en revistas científicas de Alemania o Inglaterra, de diseñar detalladas láminas de fósiles de mamíferos y de ballenas actuales, de enviar esas láminas a Berlín para que los litógrafos se las retornaran por barco a Buenos Aires y de ahí a la imprenta, de distribuir los Anales por correo para el canje con otros museos, de enviar el “cazador” del museo a traer piezas para la colección o para canje, viajar por barco, tren o carreta para recoger huesos y cráneos de ballenas; a asistir, como invitado por el Gobierno a Tedeums, ceremonias oficiales, sepelios, etc. Se ocupó también de invitar al país a los sabios alemanes para la Academia de Ciencias de Córdoba, una de las experiencias más frustrantes para él, ya que le fue imposible, en su condición de Comisario, ocuparse a la distancia, de los problemas que surgieron en esa provincia y que no supo o no pudo resolver.

Bibliografía


Burmeister. H. 1875a. Los caballos fósiles de la Pampa Argentina.. Obra ejecutada por orden del Superior Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, para ser presentada en la exposición de Filadelfia. Texto en español y en alemán con VIII láminas litografiadas, Buenos Aires, imprenta de la “Tribuna”. -1875: 88 pág. de texto, a dos columnas, en español y alemán, en folio grande (50 cm.).
Burmeister, H. 1875b. Die fossilen pferde der pampasformation beschrieben from Dr Hermann Burmeister Auchstrags-Berichte; eine im Auftrage der national regieruung fur die Austellung zu Paris verfastte Monografie, Buenos Aires, fur die internationale Austellung zu Philadelphia, verfasste Monographie,: i-viii: 1-88.
Burmeister.H. 1879. Die fossilen pferde der pampasformation beschrieben from Dr Hermann Burmeister Nachstrags-Berichte; eine im Auftrage der national regieruung fur die Austellung zu Paris verfastte Monografie, Buenos Aires, p. i –vii: 1-65, pl ix- xii (español y alemán).(A supplement to Burmeister, 1875).
Burmeister, H. (1889). Los caballos fósiles de la pampa argentina. Editorial: Buenos Aires: Impr. La Universidad, 1889.



Notas

(1) Revista Farmacéutica: la Asociación Farmacéutica Bonaerense, desde el mismo día de su fundación, tuvo el propósito de dotar a la entidad de un órgano oficial y así, solamente dos años después, el 1º de octubre de 1858, bajo la Presidencia del Farmacéutico Don Santiago Torres (Período 1858-1860) apareció la Revista Farmacéutica. La impresión se realizó en la imprenta de Pablo E. Coni, situada en la calle Perú N° 107, de la ciudad de Buenos Aires. La aparición de la revista, en octava y con 64 carillas, fue recibida con satisfacción por la clase farmacéutica.
(2) Una vez terminada la impresión de la obra, Burmeister rindió cuentas de los gastos que efectuara al Ministro de Gobierno: a) recibo por la compra de huesos fósiles de caballo: 3000 p.m.c; b) dibujos del caballo fósil: 2.00 p.m.; c) honorarios del litógrafo europeo: 7464 (=1200 marcos alemanes); d) gastos del fotógrafo: 100 p.m.c. Total 12.564 p.m.c. (AHMACN Nº466: 24/12/1873).

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